Dios sí contesta las oraciones!

Te ha pasado que has estado orando por alguna situación o persona y lo has hecho durante algún tiempo pero sientes como si Dios no contestara esas oraciones o que se quedan en el aire, incluso has oído testimonios de otros cómo Dios ha contestado sus oraciones milagrosamente y con las tuyas no ha pasado nada? Bueno, pues déjame contarte que yo así me sentía hace unos días, me considero una persona que cuando se compromete a orar por alguien o alguna situación lo hago de corazón y me aferro a pararme en la brecha a favor de esa petición, uno de los versículos que más mueve mi corazón es Ezequiel 22:30 donde dice: “Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo hallé“. Me llega mucho el final del versículo… y no lo hallé. Porque me imagino el dolor en el corazón de Dios al no encontrar a nadie que hablara con el a favor de otros, mi oración constante delante del Señor es: yo estoy dispuesta a pararme en la brecha para que cuando busques en la tierra me veas a mi, me encuentres a mi!

Hace poco estaba orando y Dios me permitió ver en mi espíritu un gran campo abierto cubierto de pasto pero estaba seco y en medio de ese lugar estaba un enorme tronco seco tirado en medio de la nada, me vi parada encima de él viendo hacia el cielo y hablándole a Dios. Sentí que así me ve Dios cada vez que vengo delante de él en oración en petición por algo o alguien, pero inmediatamente cuando terminó esta visión vino un pensamiento a mi mente, ni siquiera sentí que fuera yo misma la que estaba pensando esto, fue como si viniera alguien a decirme: Y de que te sirve pararte en la brecha, orar tanto por otros cuando no has recibido respuesta a tus oraciones? Dios no contesta tus oraciones! Esos pensamientos me afectaron mucho porque empecé a creerlo, empecé a sentirme cansada cada vez que pensaba en orar, empecé a sentirme molesta porque ese pensamiento se hacía cada vez más grande y me acordaba todas las peticiones que “no habían sido contestadas”, y así estuve algunos días, molesta, no tenía ganas de orar, e incluso afectó mis emociones estaba más intolerante con mis hijos, mi esposo, sin darme cuenta eso que empezó como un simple pensamiento se estaba convirtiendo en algo que estaba creyendo y afectó todo en mí.

Así estuve por algún tiempo hasta que un día no aguanté mas y hablando con mi esposo en la cocina le platiqué todo por lo que estaba pasando y cómo me sentía, él empezó a recordarme todas las veces que yo le había platicado que había orado por cierta persona o situación y Dios había contestado, cosas que en ese momento se habían borrado de mi mente! Entonces oró por mí y le dijo al Señor: recuérdale que tu escuchas cada oración y cómo has contestado cada una de ellas, las veces que lo hiciste en el momento que ella esperaba pero también las veces que lo hiciste en tu tiempo. Yo sentí como si esa oración empezara a quitar una niebla de mi mente y me di cuenta que mis pensamientos habían sido atacados por el enemigo y parada en la cocina vi por la ventana hacia afuera en donde se ve la avenida y las casas que están del otro lado y vi a varios niños pequeños con sus mamás esperando el autobús escolar. En ese momento me dí cuenta que esa era una oración contestada!!

Y es que desde hace tiempo todos los días en la mañana cuando mis hijos ya están en la escuela y mi esposo está en su trabajo en la oficina, saco a pasear a nuestros perritos alrededor de la casa y justo enfrente hay una avenida y del otro lado casas, todos los días yo veía a seis pequeños niños de entre 6 a 10 años sin ningún adulto pendiente de ellos esperando el autobús escolar y al fin niños, se ponían a jugar corriendo, aventándose entre ellos sin darse cuenta del peligro de los autos pasando rápidamente por la avenida, expuestos a que alguien pasara y les hiciera daño o incluso entre ellos mismos veía que los más grandes molestaban a los más pequeños, pensé qué podría hacer por ellos, si me acercaba a acompañarlos se vería muy raro y hasta podrían pensar que yo era un peligro, no se, estaba preocupada por esos pequeños y empecé a orar por ellos para que el Señor pusiera en algún papá o mamá ir a acompañarlos hasta ponerlos a salvo en el autobús. Así pasó el tiempo y yo todos los días que los veía oraba por ellos desde donde yo estaba, oraba para que los guardara y protegiera en todos los aspectos. Casi pasó un año y ese día cuando estaba parada en la cocina viendo por la ventana vi a cada niño con su mamá esperando el autobús! Woow para mi fue increíble verlo! Dios había contestado esa oración!! De hecho quiero compartirte la foto que tomé como recordatorio para verla cada vez que siquiera intente pensar en que Dios no contesta oraciones!

Me conmovió tanto ver esta escena que empecé a llorar pidiéndole perdón al Señor por dudar de Él y no confiar en su Palabra donde dice: “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho” 1 Juan 5:14-15. Entonces mi mente se empezó a aclarar y empecé a recordar todas las veces que Dios ha contestado tantas oraciones que he hecho, cuando una vez estaba en la iglesia de mis papis y sentí claramente que debía acercarme a una jovencita para decirle que Dios la amaba muchísimo, que era valiosa y hermosa para Él y no solo para Él sino para la gente a su alrededor y cuando lo hice, la chica empezó a llorar incontrolablemente y me dijo que esos días había estado sintiendo que no era importante, que pasaba desapercibida para los demás, que no podía sentir el amor de Dios en su vida y justo en ese momento en la iglesia estaba diciéndole a Dios que si realmente la amaba, se lo hiciera saber, Dios es tan hermoso! Y me usó a mi para contestar esa oración! Venían a mi mente todas esas ocasiones en las que literalmente he elevado una oración por alguien y había visto la respuesta. Si te contara todas las que están viniendo a mi mente y corazón en este momento creo que podría escribir un libro!

Seguro hay momentos que llegas a pensar que el Señor solo contesta grandes e importantes peticiones de los grandes siervos de Dios o que los escucha mejor a ellos, por eso creo que muchas personas en las iglesias se acercan todo el tiempo al pastor con peticiones de oración creyendo que a ellos si los va a escuchar el señor “porque ellos están más cerca de Dios” pero mira que dice en Proverbios 15:29: “…Pero él oye la oración de los justos” y en Santiago 5:16 “La oración eficaz del justo puede mucho”. Tu ya has sido justificada por la sangre de Jesús! (Romanos 5:9) entonces ten la seguridad en que él está atento a tu oración por muy pequeña o insignificante que creas que es, Él sí escucha y si contesta las oraciones! Hay veces que traemos una petición delante de Él pero no lo dejamos actuar, tratamos de resolverlo por nuestras propias fuerzas o en nuestras capacidades y así no funcionan las cosas, lleva tus peticiones al Señor, haz tu parte y deja los resultados a Dios!

Tal vez esto que te estoy contando es algo súper sencillo pero es mi experiencia y quería contartela para animarte a que sigas orando por todo aquello que está en tu corazón, a que sigas hablando con Dios, no desistas ni te canses, el enemigo odia cuando tus rodillas tocan el piso porque sabe que algo pasará! No importa si es una petición pequeña o muy grande e imposible de resolver, si algo te preocupa recuerda Filipenses 4:6 NTV “No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho.”  También quiero aconsejarte que cuides tu mente, porque como me pasó a mi, puede ser que tu mente esté siendo atacada con pensamientos negativos y de incredulidad acerca de la Palabra de Dios y su verdad, si en algún momento piensas que Dios no te escucha puedes seguir estos 3 pasos cuando te des cuenta que tu mente está bajo ataque: 

1. RECONOCE– Cree que esos pensamientos no son tuyos, porque tu sabes que Dios es bueno y fiel a su Palabra y si El prometió que escucharía tu clamor, Él lo va hacer, tu mente está bajo ataque con el propósito de debilitar tu fe en la oración y en las promesas de Dios. 

2. RESISTE– Toma cautivos esos pensamientos y llévalos delante del Señor. “…Derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,” 2 Corintios 10:5

3. RECUERDA Y AGRADECE– Reemplaza esos pensamientos por recuerdos donde Dios ha contestado tus oraciones, recuerda lo que Dios ya ha hecho por ti, recuerda tus victorias y Agradece por todo lo que Él ya ha hecho, deja en sus manos todos tus planes y proyectos, confía, confía, confía y descansa, tenemos un Dios que nos ama, anhela que hablemos con él y cumple sus promesas! Salmos 62:5 “Alma mía, en Dios solamente reposa, Porque de él es mi esperanza.” 

Te dejo algunos versículos que sé te ayudarán y animarán…

“Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.”

Mateo 7:7-8

“orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos; ”

Efesios 6:18

“Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; Derramad delante de él vuestro corazón; Dios es nuestro refugio.”

Salmos 62:8

“Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré. “

1 Juan 14:13-14

Espero de todo corazón que este post, mi experiencia te haya animado y sigas hablando con Dios porque el te ama muchísimo y está pendiente de ti.